EL DÍA DESPUÉS DE
TU MUERTE.
Juan 5:28 No os maravilléis
de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán
su voz; 29 y los que hicieron lo bueno,
saldrán a resurrección de vida; más los que hicieron lo malo, a resurrección de
condenación.
Estas son palabras de nuestro
amado Señor y Salvador que nos habla de una de las verdades más concretas de la
escritura, que vendrá un día en que DIOS juzgue el mundo con justicia y aun a
todos los hombres por sus obras.
Hechos 17:30 Pero Dios, habiendo pasado por alto los
tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que
se arrepientan; 31 por cuanto ha
establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a
quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos.
Eclesiastés 12:13-14 El fin de
todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque
esto es el todo del hombre. 14 Porque
Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena
o sea mala.
Hebreos 9:27 Y de
la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y
después de esto el juicio,
Si algo ratificó Jesús es que el
mundo ya está condenado.
Juan 3:18 (TLA) »El que cree en mí, que soy el Hijo de Dios, no
será condenado por Dios. Pero el que no cree ya ha sido condenado, precisamente
por no haber creído en el Hijo único de Dios.
De la misma manera el apóstol
Pablo enseño:
Romanos 5:18 Así
que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres,
de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la
justificación de vida.
Entonces ¿qué es lo que va a suceder
cuando uno muere? ¿Qué pasa con mi parte inmaterial, mis emociones mi
conciencia que me distinguen del resto de la creación? Y ¿Qué pasará con mi
cuerpo?
PARTE UNO
Primero debemos explicar algo que
ningún otro conocimiento ajeno a la biblia puede explicar, ni mucho menos la
ciencia, pero sí las benditas escrituras y es que Dios hizo el espíritu del
hombre.
Isaías 57:16
Porque no contenderé para siempre, ni para siempre me enojaré; pues
decaería ante mí el espíritu, y las almas que yo he creado.
Zacarías 12:1
Profecía de la palabra de Jehová acerca de Israel. Jehová, que extiende
los cielos y funda la tierra, y forma el espíritu del hombre dentro de él, ha
dicho:
Jeremías 38:16 Y
juró el rey Sedequías en secreto a Jeremías, diciendo: Vive Jehová que nos hizo
esta alma, que no te mataré, ni te entregaré en mano de estos varones que
buscan tu vida.
Así que cuando morimos el cuerpo se vuelve al polvo, pero el espíritu
regresa a Dios que lo dio, para ser juzgado por él.
Eclesiastés 12:7 y el
polvo vuelva a la tierra, como era, y el espíritu vuelva a Dios que lo dio.
Ahora recordemos la siguiente
palabra; Hebreos 9:27 Y de la manera que está establecido para los
hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio,
Así es amado lector, después de
nuestra muerte, la parte inmaterial creada
por Dios se presentará, ante su creador y dará cuentas de sus obras, Jesús lo
explica claramente en la siguiente historia.
Lucas
16:19-21 Había un hombre rico, que se
vestía de púrpura y de lino fino, y hacía cada día banquete con esplendidez. 20 Había también un mendigo llamado Lázaro, que
estaba echado a la puerta de aquél, lleno de llagas, 21 y ansiaba saciarse de las migajas que caían
de la mesa del rico; y aun los perros venían y le lamían las llagas.
Lucas 16:22-31 Aconteció que
murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió
también el rico, y fue sepultado. 23 Y
en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a
Lázaro en su seno. 24 Entonces él, dando
voces, dijo: Padre Abraham, ten misericordia de mí, y envía a Lázaro para que
moje la punta de su dedo en agua, y refresque mi lengua; porque estoy
atormentado en esta llama. 25 Pero
Abraham le dijo: Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro
también males; pero ahora éste es consolado aquí, y tú atormentado. 26 Además de todo esto, una gran sima está
puesta entre nosotros y vosotros, de manera que los que quisieren pasar de aquí
a vosotros, no pueden, ni de allá pasar acá. 27
Entonces le dijo: Te ruego, pues, padre, que le envíes a la casa de mi
padre, 28 porque tengo cinco hermanos,
para que les testifique, a fin de que no vengan ellos también a este lugar de
tormento. 29 Y Abraham le dijo: A Moisés
y a los profetas tienen; óiganlos. 30 El
entonces dijo: No, padre Abraham; pero si alguno fuere a ellos de entre los muertos,
se arrepentirán. 31 Mas Abraham le dijo:
Si no oyen a Moisés y a los profetas, tampoco se persuadirán aunque alguno se
levantare de los muertos.
Apocalipsis 14:9 Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran
voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente
o en su mano, 10 él también beberá del
vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será
atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero; 11
y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen
reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie
que reciba la marca de su nombre.
El día después de tu muerte mientras
te están sepultando en la tierra, o incinerando, según sea el caso, tu parte
inmaterial, o sea tu espíritu y alma, abrirán los ojos y delante del CREADOR
darás cuantas de todas tus obras, a la luz de dos sencillos mandamientos.
Marcos 12:29-30 Jesús le respondió: El primer mandamiento de
todos es: Oye, Israel; el Señor nuestro Dios, el Señor uno es. 30 Y amarás al Señor tu Dios con todo tu
corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este
es el principal mandamiento.
Marcos 12:31 Y el
segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro
mandamiento mayor que éstos.
A) Si
tu respuesta es similar a esta: Señor Jesús, tú lo sabes todo; tú sabes que
te amo.
Puesto que te arrepentiste en vida y creíste
en el evangelio; Mar 1:15 diciendo: El
tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed
en el evangelio. Habiendo creído de corazón en Cristo para la
salvación de tu alma, por el arrepentimiento para con Dios y la fe en su nombre.
Amando a Cristo con toda tu alma, tu mente y todas tus fuerzas. Y a tus
hermanos como a ti mismo.
1Jn 4:20 Si
alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que
no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha
visto? 21 Y nosotros tenemos este
mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano.
Juan 21:17 Le dijo la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas?
Pedro se entristeció de que le dijese la tercera vez: ¿Me amas? y le respondió:
Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te amo. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas.
Entonces vendrás al seno de Abraham
que es lo mismo que el paraíso, delante de la presencia del Señor junto a
Cristo Salvador nuestro.
Hebreos 12:22 sino
que os habéis acercado al monte de Sion, a la ciudad del Dios vivo, Jerusalén
la celestial, a la compañía de muchos millares de ángeles, 23 a la congregación de los primogénitos que
están inscritos en los cielos, a Dios el Juez de todos, a los espíritus de los
justos hechos perfectos, 24 a Jesús el
Mediador del nuevo pacto, y a la sangre rociada que habla mejor que la de Abel.
Lucas 23:42 Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas
en tu reino. 43 Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.
Esto lo podemos corroborar con
Esteban inmediatamente después de ser apedreado.
Hechos 7:55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo,
puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la
diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo
los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se
taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le
apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se
llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba
y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60
Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta
este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió.
Juan 14:3 Y si me fuere y
os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo
estoy, vosotros también estéis.
B) Pero
si tu respuesta es:” ¡UPS!, a poco había que amarte de esa manera”, y además traes
alguna falta de perdón o amargura contra alguien.
Mat 6:15
más si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os
perdonará vuestras ofensas. Heb
12:15 Mirad bien, no sea que
alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de
amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados;
Mateo 25:41 Entonces dirá
también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno
preparado para el diablo y sus ángeles. 42
Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis
de beber; 43 fui forastero, y no me
recogisteis; estuve desnudo, y no me cubristeis; enfermo, y en la cárcel, y no
me visitasteis. 44 Entonces también
ellos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, sediento,
forastero, desnudo, enfermo, o en la cárcel, y no te servimos? 45 Entonces les responderá diciendo: De cierto
os digo que en cuanto no lo hicisteis a uno de estos más pequeños, tampoco a mí
lo hicisteis.
Entonces como el rico, abrirás
tus ojos y te encontrarás en el tormento eterno, alejado de la presencia del
Señor y la gloria de su poder.
2Tesalonisenses 1:8 en llama de fuego, para dar retribución a los
que no conocieron a Dios, ni obedecen al evangelio de nuestro Señor Jesucristo;
9 los cuales sufrirán pena de eterna perdición,
excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder,
Gálatas 6:7-8 No
os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare,
eso también segará. 8 Porque el que
siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para
el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna.
C) También
es importante señalar que una vez muriendo, ya no hay otra oportunidad, no existe
nada como un purgatorio en donde todavía estas como en chance de ir al cielo,
ni tampoco se te dará un oportunidad después de esta vida, y tampoco podrán hacer
nada en la tierra de los vivientes por ti. la palabra es muy clara.
Hebreos 9:27 Y de la manera que está establecido para los
hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio,
Lucas 16: 26
Además de todo esto, una gran sima está puesta entre nosotros y
vosotros, de manera que los que quisieren pasar de aquí a vosotros, no pueden,
ni de allá pasar acá.
Tampoco
podrás avisar a tus familiares o seres queridos a través para que no vengan a
este lugar de tormento ni en sueños o de cualquier forma, ni mucho menos
mandando alguien de entre los muertos.
Te ruego, pues, padre, que le envíes a la casa de mi
padre, 28 porque tengo cinco hermanos,
para que les testifique, a fin de que no vengan ellos también a este lugar de
tormento.
La única
forma es creyendo en la biblia (Moisés, los profetas y los salmos, y ahora el
nuevo testamento). Pero si la gente no cree en la palabra de Dios mucho menos
se persuadirá si alguien viene de entre los muertos, la biblia dice que solo
somos salvos por la fe en Cristo.
30 El entonces
dijo: No, padre Abraham; pero si alguno fuere a ellos de entre los muertos, se
arrepentirán. 31 Mas Abraham le dijo: Si
no oyen a Moisés y a los profetas, tampoco se persuadirán aunque alguno se
levantare de los muertos.
Efe 2:8 Porque por gracia sois salvos por medio de la
fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; 9 no por obras, para que
nadie se gloríe.
Juan 11:25 Le
dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté
muerto, vivirá. 26 Y todo aquel que vive
y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto? 27 Le dijo: Sí, Señor; yo he creído que tú eres
el Cristo, el Hijo de Dios, que has venido al mundo.
Juan 3:18 El
que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado,
porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.
PARTE DOS
Hasta ahora sabemos que pasa con
nuestro espíritu al morir, que será guardado o en la presencia de Dios o
separado de él, reservando a las almas hasta el juicio final, ya sea en la
gloria de Dios, o en el tormento del infierno.
2Pe 2:4
Porque si Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que
arrojándolos al infierno los entregó a prisiones de oscuridad, para ser
reservados al juicio;
Cuando morimos entonces tu espíritu
ya está reservando el lugar de tu cuerpo para el día que Dios prometió que resucitarían los
cuerpos del sepulcro para encontrarse con su espíritu nuevamente y entonces ser
juzgados completamente, cuerpo material y cuerpo espiritual y entonces estar en
el lugar definitivo, el lago de fuego o la gloria eterna.
Una vez muriendo en esta carne ya
no hay opción, inmediatamente sabrás tu destino eterno, solo falta esperar
digamos, el trámite que será el día en que Dios juzgue al mundo con justicia,
Hechos 17:31 (TLA)
Porque Dios ha decidido ya el día en que juzgará a todo el mundo, y será
justo con todos. Dios eligió a Jesús para que sea el juez de todos, y ha
demostrado que esto es cierto al hacer que Jesús resucitara.».
ENTONCES ESPERAREMOS ESE DÍA QUE
JESÚS PROMETIÓ:
Juan 5:28 No os maravilléis
de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán
su voz; 29 y los que hicieron lo bueno,
saldrán a resurrección de vida; más los que hicieron lo malo, a resurrección de
condenación.
Y NOS PRESENTAREMOS ANTE EL GRAN
TRONO BLANCO, UNIDO EL CUERPO RESICITADO CON EL ALMA QUE ESTABA RESERVADA, PARA
AHORA SI ESTAR EN EL FIN DE TODAS LAS COSAS ECHAS.
Apocalipsis 20:11-15 Y vi
un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual huyeron
la tierra y el cielo, y ningún lugar se encontró para ellos. :12 Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de
pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual
es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban
escritas en los libros, según sus obras. 13
Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades
entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus
obras. 14 Y la muerte y el Hades fueron
lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda. 15 Y el que no se halló inscrito en el libro de
la vida fue lanzado al lago de fuego.
Los que no están inscritos en el
libro de la vida serán lanzados al lago de fuego que es la muerte segunda, o
sea la separación eterna de Dios y de la gloria de su poder.
Los que sí están inscritos en el
libro de la vida, entonces vendrán a la nueva ciudad de Dios, la nueva Jerusalém, la gloria eterna.
Nota: El origen del libro de la vida es un misterio, sabemos
por la escritura que los nombres son borrados y no anotados.
Apo 3:5 El que venciere será vestido de vestiduras
blancas; y no borraré su nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre
delante de mi Padre, y delante de sus ángeles.
Éxo 32:32 que perdones ahora su pecado, y
si no, ráeme ahora de tu libro que has escrito.
Sal 69:28 Sean raídos del libro de los
vivientes, Y no sean escritos entre los justos.
Apo 21:1 Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque
el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más. 2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva
Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada
para su marido. 3 Y oí una gran voz del
cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará
con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios.
4 Enjugará Dios toda lágrima de los ojos
de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor;
porque las primeras cosas pasaron. 5 Y
el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las
cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas. 6 Y me dijo: Hecho está. Yo soy el Alfa y la
Omega, el principio y el fin. Al que tuviere sed, yo le daré gratuitamente de
la fuente del agua de la vida. 7 El que
venciere heredará todas las cosas, y yo seré su Dios, y él será mi hijo. 8 Pero los cobardes e incrédulos, los
abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos
los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es
la muerte segunda. 9 Vino entonces a mí
uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete plagas
postreras, y habló conmigo, diciendo: Ven acá, yo te mostraré la desposada, la
esposa del Cordero. 10 Y me llevó en el
Espíritu a un monte grande y alto, y me mostró la gran ciudad santa de
Jerusalén, que descendía del cielo, de Dios, 11
teniendo la gloria de Dios. Y su fulgor era semejante al de una piedra
preciosísima, como piedra de jaspe, diáfana como el cristal. 12 Tenía un muro grande y alto con doce puertas;
y en las puertas, doce ángeles, y nombres inscritos, que son los de las doce
tribus de los hijos de Israel; 13 al
oriente tres puertas; al norte tres puertas; al sur tres puertas; al occidente
tres puertas. 14 Y el muro de la ciudad
tenía doce cimientos, y sobre ellos los doce nombres de los doce apóstoles del
Cordero. 15 El que hablaba conmigo tenía
una caña de medir, de oro, para medir la ciudad, sus puertas y su muro. 16 La ciudad se halla establecida en cuadro, y
su longitud es igual a su anchura; y él midió la ciudad con la caña, doce mil
estadios; la longitud, la altura y la anchura de ella son iguales. 17 Y midió su muro, ciento cuarenta y cuatro
codos, de medida de hombre, la cual es de ángel. 18 El material de su muro era de jaspe; pero la
ciudad era de oro puro, semejante al vidrio limpio; 19 y los cimientos del muro de la ciudad estaban
adornados con toda piedra preciosa. El primer cimiento era jaspe; el segundo,
zafiro; el tercero, ágata; el cuarto, esmeralda; 20 el quinto, ónice; el sexto, cornalina; el
séptimo, crisólito; el octavo, berilo; el noveno, topacio; el décimo,
crisopraso; el undécimo, jacinto; el duodécimo, amatista. 21 Las doce puertas eran doce perlas; cada una
de las puertas era una perla. Y la calle de la ciudad era de oro puro,
transparente como vidrio. 22 Y no vi en
ella templo; porque el Señor Dios Todopoderoso es el templo de ella, y el
Cordero. 23 La ciudad no tiene necesidad
de sol ni de luna que brillen en ella; porque la gloria de Dios la ilumina, y
el Cordero es su lumbrera. 24 Y las
naciones que hubieren sido salvas andarán a la luz de ella; y los reyes de la
tierra traerán su gloria y honor a ella. 25
Sus puertas nunca serán cerradas de día, pues allí no habrá noche.26 Y llevarán la gloria y la honra de las
naciones a ella. 27 No entrará en ella ninguna cosa inmunda, o
que hace abominación y mentira, sino solamente los que están inscritos en el
libro de la vida del Cordero.
ASÍ QUE ARREPINTÁMONOS PARA CON
DIOS Y PONGAMOS NUESTRA FE EN CRISTO JESÚS PARA SALVACIÓN DE NUESTRAS ALMAS, LA
SALVACIÓN ETERNA, PARA ESCAPAR DEL LAGO DEL FUEGO, Y VIVIR SIEMPRE AMANDO A
CRISTO JESÚS POR TODA LA ETERNIDAD.
No olvides revisar con la
escritura si las cosas son así. (este tema genera muchas otras preguntas y doctrinas mas, que no pudimos incluir en este texto, por favor si tienes alguna duda sobre estas cuestiones, por favor, con el objetivo de edificación en humildad y mansedumbre, no dudes en escribirnos, gracia y paz).
www.ibiblica.com.mx correo
josee_plascencia@hotmail.com